Todos
hemos viajado en grupo, con amigos, familiares, pareja, etc. Pero...
Después de viajar solo y poder apreciar la diferencia... ¿Cuál de
las dos es mejor? ¿Solo o acompañado?
Tengo
que decir que no hay punto de comparación. Cada uno es distinto y
aporta diferentes cosas. ‘Para gustos, colores’.
Os
comento mi primera experiencia viajando con un grupo al que no
conocía de nada, salvo a una chica con la que había cruzado unas
cuantas palabras.
Después
de regresar de mi excitante aventura por tierras holandesas empecé a
notar los síntomas del ‘síndrome del viajero eterno’ o ‘culo
inquieto’ (como prefiráis llamarlo).
Me
encontraba de nuevo en Suiza sin ningún viaje en el horizonte. Así
que decidí buscar gente para planear alguna escapada durante el fin
de semana, cualquier sitio era bueno para saciar mis ganas de
aventurera.
Buscando
y buscando encontré a una chica que quería viajar y se apuntaba a
un ‘bombardeo’. Contacto con ella, pero no me responde enseguida
sino un par de días después.
Me
comenta un ‘superplan’. Así, sin vaselina ni nada, directa.
El
plan consiste en ir a Milán en coche con varias personas, que hasta
el momento no sabía ni que existían, y pasar por alguna que otra
ciudad Suiza que ‘pilla’ de paso.
Allí
me encuentro. Con unas ganas enormes de viajar y al mismo tiempo
desconfiando un poco de todo el plan. ¿Qué debo hacer? No conozco a
nadie, ¿por qué debería embarcar en una aventura con gente
desconocida?
Lo
mejor de todo es que esas dudas y prejuicios no duran ni dos
segundos. Acto seguido, confirmo mi participación y me embarco en la
aventura.
Somos
7 personas, cada uno hijos e hijas de nuestros padres y madres. Con
unos gustos y puntos de vista totalmente dispares y rara vez
parecidos. Así que la tensión se palpa a la hora de decidir qué
hacer. Ya es difícil que se pongan de acuerdo dos personas...
imaginad 7.
Este
es el gran inconveniente de viajar con un grupo tan numeroso y con
gustos y opiniones tan diferentes.
Pero,
a pesar de todo ello, somos gente mayor y razonable por lo que al
final llegamos a un consenso. Acabamos formando subgrupos basados en
las preferencias de visita.
La
cuestión es que al final todos estemos contentos y a gusto.
De
esta maravillosa experiencia saqué muchos puntos positivos:
-
Entender a los demás
-
Adaptarme a nuevas situaciones
-
Entablar nuevas relaciones
-
Descubrir gente increíble
Entre
muchas otras, siempre se aprenden de las experiencias, eso dicen,
¿no?
Conocí
a gente extraordinaria, con inquietudes diferentes, pasamos buenos
momentos, reímos, lloramos de la risa y descubrimos nuevos lugares
juntos. Suena demasiado perfecto para ser verdad. Había
discrepancias, como en todos los casos a la hora de elegir.
Las
oportunidades se presentan muy pocas veces en la vida. Hay que
aprovechar cada una de ellas para luego no arrepentirse de lo que
pudo o no ser.
Yo
decidí arriesgarme otra vez y puedo decir que al final no me
arrepiento de la decisión que tomé.
¿Y
vosotros os embarcaríais en una aventura con gente que no conocéis
de nada?
-
Mi consejo/tips para aquellos que desean viajar en grupo numeroso:
1)
Elegir y dejar muy claro el ITINERARIO.
Así, a la hora de ponerse en ruta, no habrá duda de dónde está la
próxima parada/destino.
2)
¡No cambiar el Itinerario en ningún momento!Si
habéis decidido realizar una serie de visitas a ‘X’ pueblos, no
empecéis a añadir otros sitios, ya que, normalmente, si el viaje ha
sido bien planeado no habrá mucho tiempo para otras distracciones. Y
puede que los demás no estén muy de acuerdo.
3)
Intentar dialogar a la hora de tomar decisiones.No
os dejéis llevar por la rabia o la frustración de que no se hace
eso que queréis. Debatid y llegad a un acuerdo que satisfaga a todos
los miembros del grupo.
4)
¡Formad subgrupos!
Como ya he dicho al principio, cada uno es hijo de su padre y madre,
no tenemos la misma forma de hacer turismo. Comentad lo que tenéis
en mente y si hay gente que está de acuerdo en vuestro plan, id
juntos. No porque vayáis en grupo significa que debéis ir todos a
los mismos sitios y hacer las mismas cosas, ya que el objetivo es
disfrutar. ¡Pactad un punto de encuentro y una hora y volad!
Seguramente
faltan muchas cosas a tener en cuenta, por ello me gustaría conocer
aquello que pensáis que es importante a la hora de viajar con otra
gente (conocidos y no conocidos).
Hace
casi dos años que vivo en Suiza, bueno en realidad es sólo uno dado
que el año pasado vivía en la frontera francesa... pero bueno mi
vida la hacía en Suiza. Durante ese periodo he tenido el placer de
conocer tan solo una pequeña parte de este país, podría decir 'la
punta del iceberg'.
Ahora,
¿qué conocéis/sabéis de Suiza? A parte de ser el País de los
bancos, el chocolate, el queso, los Alpes, la fondue, que es caro
como él sólo, etc... Yo, poco más conozco pero quiero conocer
MUCHO MÁS.
Dado
que la vida da muchas vueltas, y este año no podré viajar mucho ni
muy lejos, alguna escapada de fin de semana en otro País caerá, o
eso espero, y que después de dos años viviendo aquí todavía no
conozco mucho este maravilloso País me he propuesto recorrer cada
rincón y mostrar sus maravillas.
Os
invito que os embarquéis en la exploración del país de lagos y
montañas, montañas y lagos, y... nieve. Un País en el cual cada
estación está tan bien marcada que parecen sacadas de un libro del
colegio.
¿Cuál
sería el plan? Os comento. En principio, cada fin de semana, si el
tiempo y las posibilidades me lo permiten, descubriré actividades
según la época del año, nuevos pueblos, gastronomía, historia y
gastronomía. Al final quedaría una bonita guía de Suiza.
Una
vez dicho el plan, ¿porqué no empezamos con lo más básico? ¿Cómo
puedo viajar a Suiza? ¿Es necesario visa? ¿Cuál es la moneda? ¿Qué
hay del idioma? etc...
Pero
vayamos por partes, como decía mi gran amigo 'Jack el destripador',
y despejemos dudas.
Pasaporte
y visados
Cada
viajero tiene que poseer un Documento Nacional de Identidad (DNI)
valido. Para periodos MAYORES a 3 meses se necesita un visado. Si la
estancia es MENOR a 3 meses, es suficiente un pasaporte valido. Estas
reglamentaciones son válidas para las siguientes nacionalidades:
Estados
Unidos
América
del Sur (excepto Belice, República Dominicana, Haití, Colombia y
Perú)
Europa
Japón
Australia
Nueva
Zelanda
Animales
de compañía
Si
sois de los que viajan con un animal de compañía esta información
os sera relevante:
El
ingreso
de animales Para perros y gatos que entran desde el extranjero en
Suiza debe presentarse una cartilla de vacunación que demuestre que
su animal está vacunado contra la rabia. La vacunación debe haberse
efectuada al menos 30 días antes del cruce de la frontera y no datar
de más de un año. Esta norma vale también para perros y gatos que
después de una salida transitoria vuelven nuevamente a Suiza. Desde
el 1 de julio de 2007, los perros, gatos y hurones deben estar
marcados con un microchip.
Restricciones
aduaneras de entrada
Importes
libres de tasas e impuestos por persona:
Artículos
de uso personal
Los
artículos de uso personal, son aquellos que los viajeros con
domicilio en el extranjero necesitan en Suiza y traerán de vuelta a
su pais, como: Ropa, artículos de higiene, utensilios de deporte,
camaras de fotografía, de película y video, computadoras portables,
teléfonos móviles, instrumentos de música y otros
utensilios.
Provisiones
de viaje
La
cantidad permitida de alimentos y bebidas alcohólicas es la
necesaria para un dia.
Tabaco
y bebidas alcohólicas
Estos
límites sólo se aplican a personas mayores de 17 años.
250
pzas./g cigarrillos / cigarros / otros tabacos
5
litros de alcohol (hasta 18% vol.) y 1 litro de alcohol (de más de
18% vol.)
Productos
cárnicos
Pueden
importarse por persona (incl. niños) una vez por día las siguientes
cantidades máximas de carne:
1
kg de carne fresca de animales y preparados cárnicos (excepto caza)
Efectivo
No
existen limites de importacion y exportacion de efectivo.
Combustible
El
combustible almacenado en el depósito de vehículos privados no está
sujeto a impuestos, así como tampoco otro combustible adicional (p.
ej. en un bidón de reserva) hasta un máximo de 25 litros. Esto es
válido una sola vez por vehículo y día.
Otra
mercancía
También
se pueden importar otros objetos privados por un valor de 300 Francos
Suizos.
En
caso de duda consulte a la agencia suiza de aduana (Schweizer
Zollamt) o bien al sitio: www.ezv.admin.ch
Moneda
e idioma
Suiza
no es miembro de la Unión Europea siendo el Franco Suizo (CHF) la
moneda oficial del país.
De
todas formas en practicamente todos los lugares se puede pagar en EUR
pero el cambio lo recibirá en CHF.
En
Suiza existen cuatro idiomas oficiales. Dependiendo a la zona que
queramos visitar nos encontraremos con uno u otro. Aunque
generalmente, como en todos los sitios turísticos, el inglés es
válido. Dicho esto, esto son los cuatro idiomas dependiendo del
Canton:
Os
invito a pinchar en el link a fin de conocer el idioma de cada
Canton.
Corriente
El
voltaje en Suiza es de 230V/50 Hz, como en la mayoría de los países
europeos.
En
Suiza se utiliza la clavija del tipo C (bipolar) o del tipo J (de
tres patillas). Las clavijas del tipo C son compatibles con los
enchufes del tipo J.
Usted
no va a tener complicaciones con afeitadoras y otros dispositivos
eléctricos. Pero igualmente es recomendable traer un adaptador de
red. Muchos hoteles proveen adaptadores.
Teléfonos
importantes
Emergencias
117
Emergencias
policiales
118
Bomberos
144
Ambulancia
1414
Guardia
aerea suiza de rescate
112
European
emergency number
Información
general
1811
Información
general (medicos, teatro etc.)
140
Auxilio
en carretera
162
Informe
de tiempo
163
Estado
de ruta
187
Boletin
de avalanchas
Una
vez finalizado con la información básica empecemos con la aventura.
Ahora
sí, ¡MI PRIMER VIAJE realmente SOLO! Viví muchas experiencias
nuevas en el que puedo considerar ¡el mejor viaje que jamás haya
realizado! (A pesar de los errores de novato que cometí).
No
solo fue el hecho de viajar solo, también era la primera vez que
hacía ‘couchsurfing’ en solitario. Dos días en Ámsterdam y
otros dos en Leiden. Mis ‘host’, Manisha (Ámsterdam) y Alexa
(Leiden).
Qué
podría decir de ellas... solo tengo palabras de agradecimiento por
tan buenos momentos que pasé. Estoy muy agradecido por todas las
molestias que se tomaron.
Para
los que no tengáis idea de qué es esto, ‘couchsurfing’ es un
sitio en internet donde te creas un perfil y puedes, o no, hospedar
gente en tu casa de manera gratuita, ya sea para practicar un idioma
o para tener compañía y que estos te cuenten sus aventuras, etc. Es
una comunidad increíble y la recomiendo muchísimo.
Pero
vayamos por partes, como decía Jack el destripador.
-
Mi destino: Holanda, Países Bajos o como queráis llamarlo... Para
mí, el mejor lugar para tener un comienzo. Fecha de inicio: 6 de
Mayo 2016. Fecha de vuelta: 10 de mayo 2016.
-
Mi itinerario: ¡¡¡era un poco de LOCOS!!! Estaba tan emocionado y
exaltado que intentaba en tan solo cuatro días visitar lo máximo
posible... De ahí que muchas de las cosas no pudiese verlas o
hacerlas... (¡¡PRIMER ERROR DE NOVATO!! ¡INTENTAR ACAPARARLO
TODO!) ¡¡Pero volveré!! (A lo Schwarzenegger).
Dicho
esto, MI ITINERARIO, de locos, era en un principio: Amsterdam,
Harleem, La Haya, Leiden, Rotterdam, el parque de Keukenhof y
Ultrech.
Al
final, lo hice casi todo salvo Ultrech. Eso sí, más bien fue una
carrera de fondo por las ciudades, sin parar en ninguna zona
específica ni deleitarme con ninguna atracción especial. (¡SEGUNDO
ERROR DE NOVATO! Ahora comprendo que al menos debí visitar algún
museo). Aunque en mi defensa diré que intenté ir al museo de Anne
Frank, pero llegué tarde a la venta de entradas online (se venden
muy rápidas) ¡Y la cola para comprarla allí era una LOCURA!
Os
preguntaréis, ¿por qué el mejor país para tener un comienzo?
Desde mi humilde opinión, Holanda es un país con una cultura tan
variada (allí conviven un montón de personas de diferentes
culturas) y la mentalidad de la gente holandesa es simplemente...
Increíble.. ¿Cómo descubrí eso? Muy sencillo, conociendo la
historia del lugar mediante un Tour y viviendo durante unos pocos
días allí.
DÍA
1: 6 de MAYO 2016.
Llegó
el día. Salgo desde Ginebra (Suiza) y aterrizo en Ámsterdam sobre
las 20.50 horas.
Primer
reto: ¡encontrar a la chica de ‘couchsurfing’!
Aunque
todo está hablado y ‘pactado’, cuando eres novato tienes tus
dudas y desconfianzas...
Llegas
a un nuevo país, no tienes reserva de hostel/hotel/B&B... Solo
la palabra de alguien con quien has cruzado cuatro mensajes... ¡A
pesar de todo decides seguir adelante ya que es la aventura!
Nada
más aterrizar contacto con Manisha y decidimos quedar en un bar
llamado ‘COTTON CLUB’ que se encuentra en la plaza Nieuwmarkt.
Todos
los viernes por la noche mucha de la gente que hace ‘couchsurfing’
se reúne en este club. Si queréis conocer gente os recomiendo ir
allí.
Cojo
el metro desde el aeropuerto hasta Ámsterdam.
Ahora
sí, gracias a la bendita tecnología de hoy y al GPS me pongo en
camino hacia la plaza Nieuwmarkt, pero no sin antes hacer unas fotos
y disfrutar de la belleza de Ámsterdam de noche. ¡Qué increíble
estampa!
Y
seguimos nuestro camino, dirección ‘COTTON CLUB’. Al llegar,
espero en la puerta e intento buscar a Manisha (no la veo por ningún
lado). Le mando un WhatsApp pero no le llega el mensaje... Lo que se
me pasa por la cabeza en esos momentos es todo malo... "Mierda,
ahora tengo que buscar un hotel, hostel...", "me ha dejado
tirado", etc. Así que decido seguir buscando y en vez de
esperar en la puerta paso dentro.
Y
allí estaba. Mi gran sorpresa: estaba en una reunión de gente
‘couchsurfers’ (tanto ‘host’ como ‘guest’).
No
hay mejor experiencia que encontrarte el primer día con tanta gente
nueva y hacer amigos/conocidos de una manera tan fácil. Además te
das cuenta de que no eres el único que hace eso.
¡Conoces
tantas historias que al final te entran aún más ganas de viajar y
cada vez por más tiempo!
Después
de esta primera e inmejorable parte me dirijo a casa de Manisha,
junto con 3 chicos más (un búlgaro, un canadiense y una mexicana),
a descansar para comenzar la aventura temprano.
DÍA
2: 7 de MAYO 2016.
No
eran ni las 8 A. M. y ya estoy de pie. Emocionado, excitado por
conocer Ámsterdam.
Por
internet había conseguido apuntarme a un tour ‘gratuito’
(son de esos que al final das dinero según tus posibilidades). La
hora de la cita: 10.30 A. M. Lugar: Plaza Dam.
Dos
horas y media antes de que comience el tour, decido patearme la zona.
Tengo que aprovechar cada minuto si pretendo realizar mi itinerario
de locos.
No
puede haber mejor comienzo para mi aventura que la Plaza Dam. Sitio a
partir del que se había comenzado a construir Ámsterdam.
Justo
allí, puedo ver unos cuantos monumentos turísticos como son: el
Monumento Nacional, el Palacio Real, la Iglesia Niewe y el Museo
Madame Tussaud.
Compro
un mapa en la oficina de turismo, que se encuentra justo al lado de
la estación de tren.
¡Nota
informativa! Los mapas turísticos en Holanda son todos de pago.
Ahora
sí, con mapa en mano continúo recorriendo Ámsterdam.
Durante
mi recorrido, al ser primera hora y sábado, no hay casi nadie en la
calle (como podéis apreciar en las fotos) pero a partir de las 9 A.
M. Ámsterdam se levanta y las calles están repletas de gente.
Espero
al tour, que me enseña las zonas más turísticas de Amsterdam
durante unas 2 horas y media, o quizás fueron 3 horas.
Conozco
gente de Sudamérica (México, Argentina, Venezuela). Yo soy el único
que vengo de España. Reímos, me cuentan dónde habían estado, etc.
La mayoría se encuentra haciendo un tour por Europa.
Después
del tour vuelvo a recorrer todo pero con más detenimiento.
Visito
el barrio Jordam, donde se encuentra la casa museo de Anne Frank.
Camino por la orilla de los tantos canales que hay en Amsterdam (de
ahí que se le llame la Venecia del Norte), voy al barrio judío, al
barrio chino, al mercado de las flores, y a otros tantos lugares,
hasta que por la tarde-noche me dirijo al famoso Barrio Rojo para
conocer un poco la vida nocturna de Ámsterdam.
Me
recorro casi todo Ámsterdam en un día y otro error que cometo es...
¡No llevar unas zapatillas adecuadas para caminar!
Sinceramente,
no había visto jamás en mi vida nada parecido al Barrio Rojo:
grupos de gente, tanto hombres como mujeres, parejas, solteros, todos
caminando por un sitio que tiene como fin el entretenimiento sexual.
Hablo con porteros (colombianos, holandeses), señoritas de compañía
e incluso hago un amigo italiano cuando ambos nos encontrábamos
sentados en la orilla del río bebiendo una cerveza.
Esta
es la magia de viajar solo; conoces gente, no tienes vergüenza,
estás a gusto contigo mismo y, lo más importante, no te sientes
obligado a ir a ningún sitio porque no rindes cuentas a nadie más
que a ti mismo.
Al
final de la noche, y después de casi 13 horas caminando, voy a
reunirme con Manisha en otro club donde hay otra reunión de
‘couchsurfers’, hasta que decidimos ir a descansar.
Algo
que me resulta muy curioso cuando voy a picotear por Holanda es que
no es un país que destaque especialmente por su gastronomía.
La
guía me recomienda el único sitio que ella conoce en el que sirven
platos holandeses (podemos contarlos con la mano). Podemos decir que
Pizzas, Kebab y sobre todo comida china es lo que más nos
encontrarnos en Ámsterdam.
DÍA
3: 8 de MAYO 2016
Mis
últimas horas en Ámsterdam.
Al
igual que el día anterior, me levanto temprano (todos dormían aún).
La noche anterior me despedí de Manisha y le agradecí todo (siempre
hay que ser educados).
Esta
vez con mochila en la espalda me decido a recorrer la zona que no
había podido recorrer ayer. Me dirijo a primera hora al Barrio de
los Museos y al Vondelpark. Me hago la típica foto con las letras de
‘I amsterdan’ y prosigo con mi recorrido.
Al
medio día cojo el tren que me lleva a Leiden, mi próximo destino
turístico y donde me esperaría mi segunda experiencia
‘Couchsurfing’
Al
llegar, justo en la puerta me espera Alexa, una chica holandesa muy
maja. Mi segunda experiencia ‘couchsurfing’.
Me
confundo de salida, como es habitual en mí, así que me cuesta un
poco llegar. Vamos a su piso, dejamos mi mochila y sin más dilación
nos ponemos a recorrer Leiden.
Leiden
es un pequeño pueblo de Holanda que parece sacado de una película.
Con una arquitectura similar a Ámsterdam, aunque en pequeño.
Mi
guía particular, Alexa, me muestra todos los sitios que tiene
apuntados en mi lista ¡E incluso muchos más! Me enseña un pequeño
rincón de la ciudad que solo la gente de allí conoce, y tampoco
todos...
Con
ella aprendo algunas palabrejas en holandés, aunque se me olvidan en
un par de minutos.
Al
ser un pueblo pequeñito, en menos de unas horas lo vemos entero. Nos
lo recorremos ‘de cabo a rabo’. Dado que ella tiene una reunión
con su familia por el día de la madre, yo decido moverme hasta La
Haya y continuar el itinerario
Vuelvo
a coger el tren, esta vez desde Leiden con destino La Haya.
En
un principio pensé que iba a seguir más o menos la misma
estructura, en cuanto a arquitectura se refiere, que Leiden y
Ámsterdam, pero conforme comienzo a patear la ciudad veo que no es
nada parecida
En
una esquina de la ciudad me encuentro con grandes rascacielos que
desentonan con el resto de la ciudad. Recorro el centro, pasando por
el barrio chino (sí, aquí hay una fuerte influencia de la cultura
china), me planto en Winkel Kern, Hofkwartier, Nieuwe Kern y, por
último, termino en el Vredespaleis. Aunque claro, antes de subir a
la otra punta de la ciudad hago una pausa en Historische kern, que
hay un parque muy bonito para descansar y tomar una pausa. ¡Los pies
los tengo en sus límites! (malditas zapatillas, quién me mandaría
a no meter unas más adecuadas...)
Lo
más impresionante es la cantidad de esculturas que hay a lo largo de
toda la gran vía o calle principal.
Al
finalizar el día vuelvo a Leiden a descansar y me encuentro una rica
cena holandesa preparada por una chica holandesa muy simpática que
me esperaba.
DÍA
4: 9 de MAYO 2016.
Sigo
con las buenas manías y a las 7:00 A.M estoy de pie. Destino: el
parque de tulipanes de Keukenhof.
Había
visto algunas imágenes en internet y la verdad es que me llamó
mucho la atención. Así que decido visitarlo para comprobar si las
fotos se corresponden a la realidad. Y, en efecto, mis expectativas
se ven saciadas.
Para
mi grata sorpresa el parque es más grande de lo esperado, así que
paso allí casi toda la mañana. Al terminar la visita, cojo un bus
que me lleva directo a Haarlem.
Me
dirijo a la oficina de turismo de Haarlem para no perder las buenas
costumbres. Allí compro un mapa, pregunto dudas y sitios que quiero
visitar. Acto seguido continúo con la caminata, que cada vez se va
haciendo más dura.
Por
cierto, si os interesa alquilar una bici, el sitio más barato es
justo al lado de la gare. Por menos de 10 euros tienes una bicicleta
para todo el día
Empiezo
justo en el Grote Markt y voy tachando cosas de mi lista. En la plaza
me encuentro con el Corrie ten Boom Museum, Hoofdwacht, De Hallen en
Archeoogisch Museum, etc.. Pero hay un sitio al que realmente quiero
ir y ese sitio es el Molino de Adriaan.
La
caminata por Haarlem es muy entretenida, aunque vuelvo a perderme y
una mujer holandesa muy maja, al ver mi careto de perdido, decide
echarme una mano. Gracias a esto puedo continuar mi camino.
Hago
una gran pausa, ya que los pies no me dan para mucho más. Me tomo
una buena cerveza holandesa (Amstel) sentado justo al lado del Molina
de Adriaan.
Al
finalizar el día vuelvo a Leiden en tren y preparo una buena cena de
tapeo a Alexa como agradecimiento por su hospitalidad.
DÍA
5: 10 de Mayo 2016
Llega
la despedida de Holanda y de nuestra huésped. pero no sin antes ir a
Rotterdam, una ciudad arrasada por los bombardeos de Hitler al
ver que los holandeses no quería unirse a su cruzada. Aunque al
final, debido a la presión no les quedó más remedio que unirse.
Lo
primero que me llama la atención es lo grande que es la ciudad sobre
el mapa (ya sabía que iba a sudar a la hora de recorrerla, para
colmo voy con la mochila a cuesta y los pies a punto de decir basta)
así que me pongo manos a la obra. O mejor dicho, pies al asfalto.
Nada
más salir me quedo en shock debido a la gran diferencia de las otras
ciudades holandesas con esta. Sus enormes rascacielos y su moderna
arquitectura no encajan con lo que hasta ahora he visto en Holanda.
Rotterdam
es un sitio en el que encuentro de todo. Enormes y modernos edificios
mezclados con una pequeña parte de construcciones típicas
holandesas. Las posibilidades en esta ciudad son infinitas.
Recorrer
a lo largo de sus calles y descansar un momento en sus centro es una
de las mejores experiencias que pude tener.
Visito
todos los sitios marcados en el mapa, desde la estacíon central
(donde podemos encontrar la oficina de turismo) hasta el punto más
alejado, Stadsbrouwerij De pelgrim. Allí se encuentra otro de los
molinos tradicionales de Holanda.
Holanda
es el comienzo de una locura tan buena como es la de viajar solo.
Viajar
sin compañía implica recorrer y ver nuevos sitios, conocerte a ti
mismo, saber dónde están tus límites y sobrepasarlos, implica
conocer nuevas culturas, nuevas personas, ser más tolerante.
Viajar
es lo mejor que he podido hacer hasta el momento.
Sí,
así de trivial es mi primer post/entrada. Todo comienzo tiene una
historia. Dicha historia no es ni mejor, ni peor que cualquier otra
historia que podríais leer o escuchar, os podéis o no sentir
identificados, pero simplemente es MÍ HISTORIA.
No
soy nadie especial, tan solo soy un chico corriente, nacido en una
familia corriente y que no ha hecho nada trascendente para el resto
de la humanidad, así que mi paso por este mundo será fugaz.
Hablemos
ahora de los momentos, momentos que impactan y te hacen cambiar el
rumbo de tu vida, ponen todo patas arriba y terminan definiendo quién
eres.
Dichos
momentos empiezan desde joven, cuando un familiar se ve obligada a
emigrar y dejar todo lo que ha tenido a cambio de ofrecer lo mejor a
sus seres más queridos. Después esa misma situación te ocurre a ti
y te ves obligado a dejar todo en busca de un futuro.
Pero...
todo esto no es malo. Al contrario, gracias a esos momentos y
experiencias descubres una nueva pasión, una nueva visión de la
vida y creces como persona. Siempre hay que ver el lado bueno de las
cosas y aprender.
Salir
de tu zona de confort y trasladarte a un lugar, ya sea por un corto o
largo periodo de tiempo, no es tarea fácil. Pero si nunca lo haces,
nunca crecerás.
Hace
casi dos años que vivo fuera de España (aunque regreso asiduamente)
y más de 15 años fuera de Ecuador, pues sí, soy un expatriado
ecuatoriano que está viviendo a día de hoy en Suiza. El miedo que
sentí, la incertidumbre y sobre todo la tristeza de dejarlo todo
atrás aún los recuerdo, pero a pesar de aquellos sentimientos otros
nuevos se apoderaban de mí: la emoción y felicidad de conocer un
nuevo lugar, conocer nueva gente, una nueva cultura, etc.
Gracias
a ello y al valor de tomar la decisión que cambió todo (decir de un
día para otro a tus conocidos: "Me voy a Francia en dos semanas
como AU PAIR") estoy aquí viajando, descubriendo nuevas
culturas, nuevas lenguas, conociendo nuevas personas y lo mejor,
conociéndome a MÍ MISMO!!! Fue el impulso que necesité para hacer
mi gran pasión/sueño realidad.
Es
verdad, no todos los comienzos son fáciles, te sentirás solo,
triste, melancólico, no comprenderás por qué estás allí con lo
bien que estabas en tu casa con tu familia y amigos... Pero sabéis...
Esos sentimientos no durarán para siempre... Al cabo de poco tiempo
os daréis cuenta que no sois los únicos en esa situación, somos
muchos en la misma o en una situación parecida. Y es entonces cuando
encuentras a gente (buena y no tan buena) comienzas a sentirte mejor,
ya que no estás solo (desgraciadamente las personas no sabemos
muchas veces estar solas durante mucho tiempo) porque has encontrado
a alguien más. Todo ha cambiado, ahora el nuevo lugar en el que
estás te gusta y quieres quedarte allí. De todo esto aprenderás a
conocerte mejor, a conocer mejor a los demás y a saber elegir por
tí. Al fin y al cabo, estás allí por ti y para tí.
He de decir que no he podido viajar todo lo que me hubiera gustado viajar (debido al tiempo y la economía), pero... tiempo tenemos de sobra y lo único que necesitamos son ganas de luchar para conseguir todo aquello que queremos o deseamos. He
viajado con pareja y amigos, hasta que un día decidí viajar solo
para cambiar mi vida (aunque sabía que me esperaba alguien en el
aeropuerto, así que no cuenta como viajar solo a la aventura..).
Pero, el día que decidí realizar realmente mi viaje SOLO fue la
mejor decisión que pude tomar, ya que los momentos vividos los
llevaré conmigo siempre. El dinero no se vendrá con nosotros a la
tumba, sino las experiencias y momentos vividos.
Dicho
viaje fue hace unas semanas, exactamente el 6 de Mayo del 2016, fecha
que recordaré siempre. Mi destino: HOLANDA, pero os contaré sobre
éste más adelante en una próxima entrada/post.
Así
que podríamos decir que todo comenzó el 19 de Diciembre de 1999
,cuando emigré a España con mi madre, mi vena de viajero despertó
y se quedó en hibernación hasta ahora...
Lo
único que quiero es animar a toda esa gente que quiere pero le da
miedo lanzarse a la aventura. Nuevas y buenas experiencias os
aguardan.
Al
fin y al cabo, como dice José Manuel Fajardo: "Digamos que uno
no tiene por qué amar aquel lugar al que pertenece, sino que uno
pertenece a los lugares que ama".